Una zanahoria no quiere ser como un arándano, un kiwi o un mango.
A una zanahoria le da igual si los frutos rojos son más guais.
Una zanahoria quiere ser una zanahoria.
No intentes ser 'w','x','y' o 'z' ni te compares con ellos.
Tú no eres ellos.
Tú eres tú.
Una persona única.
No existe en el mundo otra persona como tú.
Quiérete, apréciate, ámate tal y como eres y tu mundo cambiará para siempre.
Aceptarte tal y como eres es el mejor regalo que puedes hacerte.
Quiérete y acéptate pero, pase lo que pase, no caigas en la autocomplacencia.
Todos podemos mejorar en muchos aspectos y podremos conseguirlo si trabajamos en ello.
Intenta mejorar día a día y acercarte a la imagen de ti que quieres llegar a ser.
Y, mientras tanto, quiérete y acéptate.
Siempre.